Las baterías no recargables, también conocidas como baterías primarias, son un tipo de batería que está diseñada para usarse una vez y desecharse después de que se le haya agotado su carga original. La función principal de estas baterías es proporcionar energía a los dispositivos electrónicos. La energía se crea a través de una reacción electroquímica que no se puede revertir, lo que significa que una vez que se agota la energía, la batería ya no sirve. Sus principales características incluyen una alta densidad de energía y una larga vida útil, lo que los hace ideales para dispositivos que requieren una fuente de energía constante durante un largo período de tiempo o para situaciones de emergencia donde se necesita una fuente de energía confiable.
Las baterías no recargables se encuentran comúnmente en una amplia variedad de aplicaciones, que van desde juguetes, linternas y relojes hasta dispositivos médicos y equipos militares. Su larga vida útil y su capacidad para funcionar en una amplia gama de temperaturas los convierten en una opción confiable para muchas de estas aplicaciones. Algunos de los principales fabricantes de baterías no recargables incluyen Duracell, Energizer y Panasonic.