Un sensor de nivel flotante es un tipo de dispositivo idealmente diseñado para detectar el nivel de líquido dentro de un tanque. El proceso de medición de estos sensores puede ser continuo o puntual. Los sensores de nivel continuo verifican los niveles en varios puntos dentro de un tanque, mientras que los sensores de nivel puntual solo indican un nivel preestablecido. Funcionan enviando una señal a un indicador o sistema de control para proporcionar una lectura del nivel del líquido. Esta tecnología se utiliza principalmente en una amplia gama de aplicaciones, como en el tratamiento ambiental de agua, en la industria cervecera y en el sector del petróleo y el gas. Ayuda a monitorear y controlar la cantidad de sustancia en un espacio determinado de manera eficiente y precisa.
Específicos de su aplicación, estos sensores se pueden personalizar para diferentes funcionalidades. Por ejemplo, en los sistemas de tratamiento de agua, garantizan que los niveles de agua permanezcan dentro de límites específicos para evitar desbordamientos. En la industria de la gasolina se utilizan en sistemas de detección subterráneos para evitar fugas. La principal característica de un sensor de nivel flotante es su versatilidad, ya que se pueden utilizar en diversos medios como aceite, agua y fluidos residuales. Los sensores son duraderos y resistentes a la corrosión relacionada con el medio ambiente, lo que los hace adecuados para su uso en entornos hostiles. Los fabricantes destacados en este campo incluyen Siemens, Honeywell y Fortive, entre otros.