Los cortacircuitos térmicos (TCO) son dispositivos de seguridad diseñados para evitar que los aparatos y circuitos eléctricos se sobrecalienten y provoquen riesgos de incendio. Estos componentes funcionan interrumpiendo el flujo de electricidad cuando detectan temperaturas que exceden los límites de seguridad. La función principal de un TCO es proporcionar un control de temperatura confiable y automático para garantizar la seguridad de los equipos electrónicos cortando la energía en caso de un aumento de temperatura más allá de un umbral predeterminado.
Los TCO se usan comúnmente en una variedad de electrodomésticos e industriales, incluidas cafeteras, secadores de pelo y sistemas HVAC, donde prevenir el sobrecalentamiento es fundamental. Son valorados por su simplicidad, rentabilidad y rendimiento confiable en condiciones críticas. Los fabricantes notables de cortes térmicos incluyen empresas como Schott, Panasonic y Elmwood.