Las placas de interfaz son componentes cruciales dentro de los sistemas informáticos integrados, diseñados para facilitar la comunicación y la conectividad entre varios dispositivos electrónicos. Su función principal es actuar como puente o intermediario, permitiendo el intercambio fluido de datos o señales entre una computadora y dispositivos periféricos, como sensores, pantallas u otro hardware externo. Estas placas suelen estar equipadas con varios puertos y conectores que admiten diferentes protocolos de comunicación, lo que garantiza compatibilidad y transferencia de datos eficiente.
Los usos principales de las placas de interfaz radican en su capacidad para mejorar la funcionalidad y versatilidad de los sistemas integrados. Se caracterizan por su construcción robusta, lo que les permite operar en una amplia gama de entornos y aplicaciones industriales. Además, estas placas son conocidas por su personalización y modularidad, lo que les permite adaptarse a los requisitos específicos del proyecto. Algunos de los fabricantes más conocidos de placas de interfaz incluyen Advantech, DIGI International y Moxa, entre otros.