Una resistencia de potencia ajustable es un tipo de resistencia variable que le permite cambiar la resistencia dentro de un circuito manualmente. La función principal de estos componentes es controlar el flujo de corriente y ajustar los niveles de señal, gestionando así la energía que se distribuye dentro de los dispositivos electrónicos. Se utilizan ampliamente para sintonizar y calibrar circuitos eléctricos, sirviendo como reóstato o divisor de potencial. Con la capacidad de disipar energía en forma de calor, son esenciales en aplicaciones donde los niveles de potencia deben ajustarse o limitarse para evitar daños a componentes sensibles.
Los usos principales de las resistencias de potencia ajustables incluyen establecer las condiciones de funcionamiento correctas en prototipos de circuitos, controlando el brillo de las luces, ajustando el control del motor y gestionando la temperatura en dispositivos de calefacción. Estas resistencias se caracterizan por su construcción robusta, su capacidad de manejo de alta potencia y su capacidad para soportar altas temperaturas. Vienen en varias formas, como tipos deslizantes, giratorios o recortadores, cada uno de ellos adecuado para diferentes aplicaciones. Varios fabricantes conocidos de resistencias de potencia ajustables son Vishay, Bourns, TT Electronics y Honeywell.