La memoria en el contexto de los componentes electrónicos se refiere a los circuitos integrados (CI) que almacenan datos digitales. Como aspecto fundamental de los dispositivos electrónicos, los circuitos integrados de memoria cumplen la función principal de retener información, a la que los dispositivos pueden acceder y procesar según sea necesario. Estos componentes vienen en varias formas, cada una diseñada para manejar datos de maneras particulares. La memoria es esencial para una amplia gama de aplicaciones, incluidos sistemas informáticos, teléfonos móviles, cámaras digitales y consolas de juegos. Las características de los productos de memoria incluyen su capacidad de almacenamiento, velocidad, volatilidad (si retienen datos sin energía) y consumo de energía.
Los circuitos integrados de memoria son parte integral del rendimiento y la funcionalidad de la mayoría de los sistemas electrónicos. Por ejemplo, la RAM (memoria de acceso aleatorio) permite a las computadoras acceder a los datos rápidamente, lo que permite de manera efectiva realizar múltiples tareas sin problemas y una respuesta rápida de las aplicaciones. Por otro lado, la ROM (memoria de solo lectura) almacena firmware y procesos de arranque críticos. La memoria flash, otro tipo, combina la velocidad de la RAM con el almacenamiento persistente de la ROM, lo que la hace ideal para dispositivos portátiles como teléfonos inteligentes y unidades USB. Los fabricantes habituales que producen circuitos integrados de memoria incluyen Samsung, SK Hynix y Micron Technology.