Sensores de movimiento: los acelerómetros son dispositivos especializados que se utilizan para medir la tasa de cambio de velocidad (aceleración) en un objeto. Pueden sentir tanto la aceleración dinámica (causada por el movimiento físico) como la aceleración estática (causada por la gravedad), lo que les permite rastrear los cambios de dirección y velocidad del objeto al que están unidos. Esto los hace particularmente útiles en una variedad de aplicaciones como mantener la orientación de teléfonos inteligentes, sistemas de navegación de aviones y controles de juegos.
Estos sensores tienen instrucciones específicas diseñadas para diversas aplicaciones. Por ejemplo, en el entrenamiento deportivo, pueden proporcionar datos sobre la velocidad y la intensidad de un atleta, que pueden utilizarse para analizar y mejorar el rendimiento. En los sistemas automotrices, pueden desencadenar el despliegue de bolsas de aire durante una colisión en función de lo repentino y severo de la aceleración. Las características clave de los acelerómetros incluyen sensibilidad al movimiento, bajo consumo de energía y resistencia a condiciones ambientales como cambios de temperatura y humedad. Algunos fabricantes reconocidos en este campo incluyen Bosch Sensortec, STMicroelectronics y Analog Devices.